sólo fue mi primer media naranja.
Cómo podemos ver estos sentimientos de pertenecias, al igual que la identidad se implantan como una ilusión posicionandonos en un lugar según la percepción que tengamos de ello, pero el principio de realidad aparece siempre en las rupturas de los ideales, de los mitos y utopías que creamos para sentirnos que pertenecemos a determiandos lugares aquellos sentimientos que pensamos como necesarios para vivir, porque así se implanta en la cultura pre-existente cuando nacemos, y de esa interacción bio-psico-ambiental vamos conformando nuestro “yo” que sabemos que realmente no es uno, sino que varios “yoes” ya que como determinaba Heráclito lo único real es el cambio, pues no podemos mojarnos dos veces en el mismo rio, así como lo percibimos cuando sentimos que somos los mismos de cuando eramos chicos hasta que en las rupturas o golpes nos llevamos sorpresas y decímos faaa no lo puedo creer de fulano mirá que yo lo conocía bien, y él nunca haría algo como eso, con este ejemplo es para notar como nos limitamos con este pensamiento ya que si tan sólo nos detenemos un minuto a pensar nos damos cuenta que ni siquiera nosotros mismos vamos a poder conocernos nunca, siempre podemos pensarnos en una situación diferente, pero nunca sabremos realmente que es lo que haríamos en ella, quizás sospecharíamos pero estoy seguro que siempre al final nos terminamos equivocando pues no hay que olvidar que todos venimos a este mundo teniendo las mismas posibilidades de pensamiento (en una generalidad estádistica que nos permita poner a tutela de juicio los puntos expuesto en esta redacción) por lo tanto todos podemos ser asesinos, homosexuales, ladrones, buenos, malos, sanos, enfermos, ¿creen que no? Entonces se están dejando llevar por aquellos mecanismos de poder que ya intuía Foucault que nos corrompen aquellos del estado que crean a las escuelas, las cárceles, los manicómios, registro civil, las leyes, los estados, etc. Y con todo ellos las lógicas dicotómicas que rigen el pensamiento, Salud-Enfermedad, Bien-Mal, Lindo-Feo, Mente-Cuerpo, etc. Porqué pensar todas estas lógicas como contrarias y no desde la complejidad como entramados tejidos, o como un rizoma, donde conectamos todo con todo en un flujo de movimiento, lejos de ser estático e ilusorio componiendo una red impenetrable de sublimaciones, fortaleciendo nuestros niveles intelectuales entendiendo a fondo los mecanismos de poder, y luchar contra la atroz rutina, la cotidianeidad que se implanta en una monotona existencia de vida para así poder acercarse al acontecimiento, a lo incierto, para poder crear niveles de existencias épicos, de antología, aquellos que nos hagan entender que creemos ser quienes somos porque así fuimos reprimidos y no porque así nacimos, entendiendo esto es absurda cualquier discriminación, ya que al discriminar a alguien nos estamos discriminando a nosotros mismos si hubieramos sido criados en otro contexto, pero la exclusión y la discriminación son desentendimientos que dan a entender un intenso monto de represión en ese ser, llevada a cabo por aquellos mecanismos de poder implantados por los Estados y sus ideologías Capitalistas, que emplearon a la familia núcleo y las mass medias cómo dispositivos de poder, un poder acrecentado a un nivel inimaginable por internet.
A partir de lo planteado por Diego, aquí les dejo mi divague:
ResponderEliminarVoy a tratar de ir haciendo una correlación con lo expuesto por él y lo que creo al respecto.
En lo primero que pensé fue en “Catarsis” y todavía acompañada de la propuesta de hacerla colectiva y bue” como buena pichón psi, simplemente expresé: -si, ¡me gusta la idea! y acá terminé.
¿Positivo o negativo que Sigmundito esté siempre presente en nuestras reflexiones? Debe ser, por como dicen algunos (ya que es el “padre del psicoanálisis”) objetos de idealizaciones parentales, en fin, para quererlo u odiarlo, hay que conocerlo e incluso citarlo.
Todo esto para remitirme a que con respecto a las idealizaciones no creo que se pierdan sino que simplemente se desplazan de los padres (primer objeto de amor) hacia otros fines, sea otro objeto u otros objetos.
Si, puede que esto coincida con empezar a ver a los padres como más reales, teniendo en cuenta que se está en ese momento comenzando a vivir nuevas experiencias y a constituir su propia identidad. Surgen sentimientos contrapuestos frente a un mundo que se presenta a nuestros pies y que creemos conquistar en un abrir y cerrar de párpados. Acompañado de este sentir nos encontramos con pares, compañeros e impulso para la exploración, para el comienzo del viaje, así como también, nos encontramos con (ahora otro) el amor.
Creo que las dudas planteadas en la adolescencia son simplemente el comienzo de búsquedas constantes, de “darse cuenta” que hay interrogantes que nos demandarán constantes exploraciones, más allá de una franja etaria determinada.
Toda búsqueda, todo cambio, sacude en sobremedida el sentimiento de incompletud, pero no es más que despertar a una especie de fiera dormida.
La incompletud hace parte para mí de nuestra esencia y es ese sentimiento el que nos lleva a divisar verdades e incentivar incertezas, a conocer personas, teorías, a encuentros y desencuentros constantes, a enamorarnos de alguien, de algo, al vernos en estados de mezcla opiácea y boludez crónica, e incluso de nuestras propias proyecciones e idealizaciones.
¡Bien dijo un viejito hace tiempo que lo único real es el cambio!
Acompañado de esto creo a pies juntillas en las metamorfosis constantes, en las que suelo sumergirme y alguno que otr@ he visto sumergirse también. En ese constante planteo y replanteo, en el puesta a punto colectivo, en las idas y vueltas…o simplemente idas.
Con respecto a las sorpresas que podemos llevarnos con la gente, y bue” digamos que son tantas y tan variadas como la población de cualquier país con superpoblación. Pero tal vez, sea lo que enriquece todo tipo de relaciones, eso que no esperás y zass, simplemente sucede. Eso es lo que nos lleva a no ser tan programaditos, al mejor estilo autómatas y tener que encarar realidades contrapuestas, diversas, que llevan a traslucir lo mejor y lo peor de nosotros mismos.
Sin duda acá se ven reflejados diversos y perversos mecanismos de control, pero esto lo propongo para que sea otro tema específico de divague colectivo si les parece, porque de lo contrario, podría explayarme más de lo debido en esta primera puesta a punto.